Avatar está de vuelta en los cines con una nueva secuela, Avatar the Way of Water, que se estrenará en los cines el 16 de diciembre. Esta nueva entrega de la franquicia tendrá lugar más de una década después de los eventos de la primera película y aún se centrará en el personaje principal, Jake Sully, y su familia. Se dedicó mucho tiempo y desarrollo a la realización de esta película. Suficiente para que hasta el director, James Cameron, se esté mordiendo las uñas.
Avatar Two debe ser “la tercera o cuarta película más taquillera de la historia. Ese es tu umbral. Ese es su punto de equilibrio”, dice Cameron. Con fuentes que dicen que costó
$250 millones hacer la película, es cuestionable por qué está estableciendo una barra que recaudaría alrededor de dos billones solo para “equilibrar”. Esto no se debe al presupuesto de la película real, sino a toda la tecnología que se desarrolló para hacer la película. Una herramienta clave que utilizó Avatar es un proceso llamado captura de rendimiento. Es cuando el movimiento de los actores se captura en el set y luego se transmite con efectos especiales para crear estos personajes ficticios. Esto se usó tanto en el Avatar original como en la secuela. Sin embargo, la nueva película resultó difícil, con muchas escenas que se desarrollaban en el agua, lo que dificulta mucho más la captura de movimiento. Debido a esto, se tuvo que desarrollar una nueva captura de rendimiento que le costó mucho a Cameron. Esto no solo explica el alto objetivo bruto, sino también por qué se tardó más de una década en hacerlo, con varios retrasos.
“Obtendrá las ganancias de taquilla de su típico éxito de taquilla. ¿Hará mucho desde una perspectiva comercial? Diablos, no. Pero desde la perspectiva de un cinéfilo, diablos, sí”, dice Nathan Kenedy, fanático de Avatar. Es difícil decir si Avatar alcanzará esta marca, pero sabemos que todavía hay una tercera en preparación, ya que se filmó junto con la segunda y se estrenará en 2024. James Cameron es ambicioso con una cuarta y una quinto planeado si éste tiene éxito. Pero solo el tiempo lo dirá y en unos días se sabrá si esta película es un fregadero o un flotador.